Esto es lo que se desprende del padre Carlos Mugica del bello testimonio del benedictino Mamerto Menapace citado por Sergio Rubín en el artículo publicado en Valores Religiosos. Menapace recuerda haber acompañado a Mugica a un retiro espiritual en el monasterio de Santa María de Los Toldos, en la provincia de Buenos Aires, dos semanas antes que fuera asesinado. «Tras el retiro espiritual, el padre Carlos se fue del monasterio con sus compañeros en la caja de una camioneta. “Al despedirnos -recuerda Menapace- me dijo que este año muchos nos encontraremos con Dios. Yo le pregunté si tenía miedo de que lo mataran y él me respondió que a lo único que le temía era a despertarse un día y saber que lo habían echado de la Iglesia. Y nos dimos un abrazo. Al enterarme de su asesinato -que para la Justicia fue la Triple A, pero hay quienes creen que lo mató Montoneros- comprendí mejor el misterio. Hizo una clara opción por la violencia de la Luz y lo mataron los miedos de la violencia de las sombras”.
[Fotos tomadas en la exposición dedicada a Carlos Mugica frente a la catedral de Buenos Aires]